Algunos liberales
no son favorables a entrar en la política partidaria. Llegan a esta conclusión a partir de una premisa que
todos compartimos: “El liberalismo es una
concepción constitucional (meta-política). Son las reglas republicanas y de
libre mercado que deben gobernar a una sociedad indistintamente del gobierno de
turno” (ver aquí).
Por ende, creen que al liberalismo corresponde la tarea de influir en la política arquitectónica pero sin entrar
en la política agonal (ver aquí).
Hay distintas maneras de incidir en la política sin entrar en la contienda
electoral, una de las cuales es mediante los Think Tanks. En la Argentina, contamos con varias fundaciones que
podrían ponerse de ejemplo.
Otros liberales,
en cambio, creemos que esta tarea cultural es necesaria, pero no suficiente. Pensamos
que hace falta implicarse en la política
agonal. Para lo cual, al menos en las democracias existentes, hay que
lograr el apoyo de la mayoría mediante el voto para acceder al poder.
Desde una perspectiva favorable a la política
agonal, quiero dedicar esta notita al candidato Juan José Gómez Centurión.
Y aclaro -desde ya- que no voté por él, sino por José Luis Espert. Por tanto,
voy a hablar de un “adversario”, que sin embargo está lejos de ser un “enemigo”
político.
Tengo las mejores
referencias personales de Gómez Centurión, provenientes de amigos y conocidos
que han tenido oportunidad de conocer bien su actuación previa a su ingreso en
la última campaña electoral. Su biografía política puede consultarse aquí.
No doy mayor importancia a algunas “denuncias” en su contra –provenientes de
los peores elementos de nuestra política- que no han tenido relevancia
judicial. Cabe recordar que Gómez Centurión tiene estudios superiores en
Ciencia Política, es un héroe de Malvinas y fue condecorado con la Cruz al
Heroico Valor en Combate, la más alta distinción militar del país.
He comenzado por
hablar de las cualidades personales de Gómez Centurión porque en política agonal de poco vale decir:
importan las ideas y no las personas. Las ideas, por sí mismas, no pueden
ponerse en práctica. Se necesita de personas que las apliquen. Sin líderes
políticos las mejores ideas quedan encerradas en las cuatro paredes del mundo
intelectual.
Pero quiero decir
algo más sobre las ideas del frente NOS, que lleva a Gómez Centurión como
candidato a la presidencia de la República. Para lo cual es menester acudir a
la fuente principal y directa del ideario, su plataforma electoral (aquí). Vale la pena
leerla completa. Porque si bien es cierto que la campaña de NOS ha puesto
énfasis en el capítulo VIDA Y FAMILIA, y un poco menos en DEFENSA y POLÍTICA
EXTERIOR, esta plataforma no deja ser integral. Si tuviera que “etiquetar” el
ideario del frente NOS diría que es conservador, con algunos elementos de
derecha nacional, pero que no asume los tópicos gastados del viejo nacionalismo
argentino. En general, las ideas el frente NOS se asemejan bastante a las del
Partido Republicano de los Estados Unidos, con singularidades propias
de la idiosincrasia argentina.
Este énfasis de
la campaña de NOS en los tres capítulos mencionados, contrasta con la campaña
de José Luis Espert, del frente DESPERTAR, la cual se ha concentrado mucho en
temas económicos, que son la especialidad de su candidato. De hecho, me decidí
a votar por Espert no sólo porque coincido con sus propuestas en lo económico,
sino porque creo que lo más urgente hoy es ordenar la economía del país. Otros
temas, si bien son importantes para las libertades civiles (ideología de
género, ESI, etc.), podrían ser abordados en un momento posterior, siempre que
se garantice un mínimo de respeto por la Constitución Nacional (ver aquí
y aquí)
y los derechos que la misma reconoce a todos sus ciudadanos.
Volviendo a Gómez
Centurión, cuando se lee el capítulo de la plataforma de NOS dedicado a la
POLÍTICA ECONÓMICA se advierte un diagnóstico correcto respecto del problema central:
el Estado asfixia al país, lo oprime y no lo deja crecer. A diferencia del
gobierno de Macri, NOS deja en claro que no pretende administrar mejor un sistema
ineficiente, que crea las condiciones para que florezca la corrupción, sino que
viene a cambiar el sistema. Tal vez una carencia de la plataforma sea que no tiene
referencias explícitas a la necesidad de la apertura comercial y a una reforma laboral. Pero tampoco se opone a estas dos grandes
reformas. Y es claro que reformar estructuralmente el Estado y bajar la carga tributaria es una condición
necesaria para que la apertura al comercio no cause daño a las empresas
argentinas, generando quiebras en masa y mayor desempleo. Una reforma del Estado,
acompañada de una baja significativa de impuestos, podría generar un salto en las
exportaciones, el cual podría impulsar demandas de mayor apertura comercial (1). Asimismo, sin
reforma de las leyes laborales sería muy difícil que el sector privado pudiera absorber
el exceso de personal estatal que hay que despedir porque no cumple ninguna
función. Luego, la plataforma de NOS se extiende sobre otros puntos importantes, que no
voy enumerar ahora para no hacer más larga esta nota. En fin, un dato adicional
para valorar justamente la plataforma de NOS es la inclusión del economista
Agustín Monteverde como coordinador de sus equipos económicos.
En las últimas
PASO, el espacio encabezado por Juan José Gómez Centurión y Cynthia Hotton
alcanzó un total de 642.636 votos, es decir un 2,63%, de acuerdo al escrutinio provisorio,
superando a José Luis Espert. Un resultado más que digno, si se considera el
efecto del clima de polarización sobre un candidato apenas conocido, de
escasísima llegada a los medios de comunicación, que arrancó tarde e hizo una campaña con
casi ningún recurso.
Algunos liberales
tienen una fuerte antipatía hacia Gómez Centurión. Seguramente esto se deba a
diversos factores, que no es del caso analizar ahora. Pero lo que llama la
atención es que esos mismos liberales se sienten muy cómodos reivindicando figuras
como Ronald Reagan y Donald Trump.
En mi opinión, el
liberalismo hoy no tiene grandes posibilidades de obtener resultados
significativos en la política agonal
si no comprende al menos dos cosas: el principal “enemigo” político es la “hegemonía
socialdemócrata”, o “progresismo sistémico” (2); para lograr implementar
políticas públicas liberales, hay que "derrotar" al "enemigo" y para ello se requiere de una alianza con sectores de “derecha” que
no son estrictamente liberales. Por tanto, veo a Gómez Centurión no sólo como
un digno adversario, sino como un potencial aliado.
_______
(1) Sobre la
simetría de Lerner ver:
(2) Ver aquí:
1 comentario:
Excelente nota Sr Avella. Válida para abrir posibilidades a un cambio verdadero y significativo. Gracias por tanto.
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